En el orden público y en la medicina, dicen que prepararse mentalmente para lo peor puede ayudarle a ir un paso por delante. Sin embargo, incluso cuando sucede lo peor, como fue el caso del oficial David Gordon, esa fortaleza mental puede ser una tabla de salvación y ayudarle a encontrar la manera de salir adelante.

Un atasco de tráfico rutinario casi mató al oficial de patrulla de carretera cuando un conductor imprudente lo convirtió en un accidente que cambió el curso de su vida. Sin embargo, los años que David había pasado en las fuerzas del orden público, junto con la experiencia de UC Davis Health, le aportaron la preparación mental y el increíble equipo de atención que le ayudó a superar la adversidad contra todas las expectativas.

Un sueño desde el octavo año

Davis pasó una década trabajando en diseño arquitectónico, pero su corazón y su mente seguían recordando un paseo que dio junto con un oficial de policía cuando estaba en el octavo año. Sabía que un trabajo de oficina no era para él, y también sabía que poseía las características necesarias para tener éxito en el campo del orden público: valor, perseverancia, inteligencia y determinación. Después de asistir a la Academia de Policía y completar el entrenamiento de campo, Davis pasó a ser uno de los pocos seleccionados para convertirse en patrullero de carreteras de California. Y no miró atrás durante los siguientes 13 años.

Una vida que cambió en un instante

La Academia de Policía le enseñó a David a prepararse para lo peor en el desempeño de su trabajo, como una parada de tráfico rutinaria que se convierte en un conflicto inesperado. “Si no se está ya mentalizado en la lucha, entonces alguien más tomará la delantera,” explica.

Aun así, David se enorgullecía de tratar de ver siempre lo mejor en las personas y en adoptar la actitud de escuchar en primer lugar. Siempre estaba pensando en el panorama general: detener el desastre antes de que sucediera.

Una noche en 2019, David y su compañero estaban respondiendo a un caso de conducción bajo los efectos del alcohol en el condado de Yuba cuando recibieron una llamada de que una señal de cruce ferroviario se había caído y el tráfico cercano estaba detenido, así que se dirigieron al lugar para ayudar. Cuando llegaron al lugar del incidente, David comenzó a dirigir el tráfico.

De repente, un conductor ebrio perdió el control al llegar a una curva en la carretera, y chocó con David a una velocidad de más de 70 millas por hora.

Lo siguiente que supo es que se encontraba en el hospital.

“Siempre fui consciente del peligro de ser embestido por un auto. Me preocupaba más eso en el trabajo que recibir un disparo,” dice David. “Siempre me mantenía bien alerta, sin confiarme. Pero no vi venir esto.”

UC Davis Health proporciona atención médica compasiva que salva vidas

Cuando David se despertó en la Unidad de Cuidados Intensivos (ICU), tenía una larga lista de lesiones graves: una fractura compuesta de ambos huesos en la parte inferior de la pierna izquierda, daño a los nervios del pie, una pelvis fracturada, vértebras partidas, costillas rotas, una muñeca rota, una mandíbula rota, la escápula derecha rota y una lesión cerebral traumática.

“He estado en accidentes en los que a las personas se les ha embestido a mucha menos velocidad y terminaron muriendo,” dice. “No sé cómo yo sobreviví, pero lo único que puedo pensar es que alguien me estaba protegiendo y por la gracia de Dios.”

David fue transportado inicialmente a un hospital local, pero debido a sus lesiones, se le trasladó por helicóptero al Centro Médico de UC Davis, que cuenta con el único centro de traumatismos de nivel I en California al norte del Área de la Bahía. Pasó 53 días en la ICU y otros 73 días en fisioterapia y rehabilitación. Durante ese tiempo, estuvo constantemente rodeado por su familia, amigos y compañeros de trabajo, pero siente una predilección especial por el equipo de atención del Centro Médico de UC Davis y las pequeñas cosas que hicieron a diario para ayudarle a perseverar.

“Los enfermeros eran increíbles,” dice. “Me llevaban a caminar. Me sacaban al aire libre y me ponían música y la cara hacia el sol. No podría haber pedido nada mejor.”

David tuvo cinco cirugías durante su hospitalización bajo la atención del Dr. Mark Lee y el equipo de traumatismos ortopédicos, muchas en los huesos pero también para extirparle el bazo para detener la hemorragia interna. Sin embargo, incluso con los rasguños y moretones en vías de curación, una gran parte de la vida anterior de David parecía estar fuera de su alcance.

“Aunque puede que en el fondo supiera que ya no iba a poder volver a subirme al coche patrulla, volver a trabajar fue una parte muy importante de lo que me impulsó a tratar de ponerme mejor,” dice David.

Un paso a la vez

Un tipo de conflicto para el que el David, que siempre estaba listo, no pudo prepararse fue la lucha interna donde su mente decía “sí”, pero su cuerpo decía “no.” Después de salir de la ICU, a David se le trasladó a la planta de rehabilitación bajo la atención del Dr. John Dorsett, donde tuvo que desarrollar su fuerza central corporal para volver a aprender a sentarse en una silla, ponerse de pie, ponerse los calcetines y muchas otras funciones motrices que muchos de nosotros damos por hecho.

“Era como si alguien le pidiera a uno que empujara una excavadora, y uno sabe que eso es imposible, pero todos están diciendo: "Sí, puedes,” recuerda.

Todos los días, David tomó la decisión activa de superar la rehabilitación y la fisioterapia. Con la asistencia de sus enfermeros, fisioterapeutas, familiares, amigos y tantos otros, pudo salir del hospital después de aproximadamente 126 días. Fue una salida que resultó más difícil de lo esperado, porque significaba decir adiós a la amabilidad y experiencia del equipo de atención que le ayudó a recuperar su fuerza.

“Los enfermeros eran increíbles. Me llevaban a caminar. Me sacaban al aire libre y me ponían música y la cara hacia el sol. No podría haber pedido nada mejor.”David

Nuevas pasiones descubiertas

La atención del equipo de UC Davis Health no se detuvo en los muros del hospital. Los integrantes del equipo de atención en el sitio le visitaron en casa también, esforzándose para asegurarse de que pudiera retomar sus actividades cotidianas como cuidar de su perro y su familia. Para ayudarle con su terapia, David atribuye a su equipo de atención el animarle a trabajar de nuevo con la madera, algo que le dio un propósito productivo y creativo conforme seguía recuperando la movilidad.

David siempre confió en que volvería al trabajo que tanto amaba. Fue uno de los principales incentivos que le ayudaron a pasar por la recuperación y la rehabilitación. Finalmente regresó durante un tiempo a un trabajo de oficina en la comisaría, y estuviera en el servicio activo o no, ya había dejado un legado duradero de protección a los ciudadanos de California, especialmente contra los conductores ebrios. De hecho, la señal de radio llamada para una orden de detención es 1015, y el 15 de octubre de 2021, David se jubiló oficialmente de las fuerzas del orden público.

Con más tiempo en casa con su esposa y su familia, David disfruta de salir con su remolque de viaje con su familia para visitar los parques nacionales, y opera una pequeña empresa que vende sus creaciones artesanales de madera. Sobre todo, está agradecido de que la increíble atención que recibió en UC Davis Health le ayudó a regresar a sus seres queridos, sabiendo ahora más que nunca que no debe darse nada por hecho.