Clínica Tepati celebra su 50 aniversario

Un estudiante de medicina en uniforme médico negro se apoya en una silla de exámenes médicos para chequear el latido de una mujer

Clínica Tepati celebra su 50 aniversario

Miles de inmigrantes latinos han recibido servicios gratuitos de salud ofrecidos por voluntarios de UC Davis

(SACRAMENTO)

Erasmo Rivera, 48, es un trabajador de mantenimiento en Sacramento. No tiene cobertura médica y solía ponerse ansioso cada vez que su esposa se enfermaba.

Una vez a su esposa le cobraron $7,000 por una visita a la sala de emergencia para tratarse una picadura de araña, una cuenta que terminó en una agencia de cobros. Otra vez, Rivera tuvo dificultad para pagar $160 para ver a un médico en un centro comunitario de salud.

Pero después descubrió Clínica Tepati — la clínica afiliada con la Facultad de Medicina de UC Davis. La clínica en Midtown Sacramento es manejada por estudiantes voluntarios con la ayuda de médicos voluntarios. Muchos de ellos, como Rivera, hablan bien el español. “Me tratan realmente bien aquí”, dijo en una cita reciente. “Ha sido una buena experiencia”.

Desde que se fundó en 1974, Tepati ha sido una salvación para decenas de miles de residentes locales que no tienen cobertura de salud o cuya cobertura es insuficiente, que aprecian ver a proveedores que entienden su cultura y su idioma.

Cerca de 40 estudiantes con uniformes médicos azules y sus mentores alrededor de mesas largas en una sala de conferencias
Cerca de 40 estudiantes universitarios, seis estudiantes de medicina y varios médicos, atienden pacientes todos los sábados en la Clínica Tepati.

Tepati también ha sido importante para la capacitación de miles de estudiantes de la Facultad de Medicina de UC Davis en Sacramento y estudiantes universitarios del campus principal de UC Davis. En los últimos años, a los voluntarios de UC Davis se sumaron estudiantes de farmacia de la Universidad del Pacífico, estudiantes de medicina de la Universidad Northstate de California y estudiantes de asistentes de medicina de la Escuela de Enfermería Betty Irene Moore de UC Davis.

“Para muchos de nuestros estudiantes, su primera experiencia atendiendo pacientes fue en la Clínica Tepati y otras de nuestras clínicas afiliadas de estudiantes al comienzo de su educación de medicina”, dijo Susan Murin, decana interina de la Facultad de Medicina de UC Davis. “Estamos orgullosos del profundo compromiso de nuestros estudiantes a la equidad en salud y su pasión por mejorar la vida de todos en nuestra comunidad”.

En 2023, más de 800 pacientes fueron a la clínica en busca de atención médica.

Clínica responde a una necesidad de la comunidad

La Facultad de Medicina de UC Davis no había estado abierta por muchos años cuando un grupo de estudiantes y profesores a principios de la década del 70 buscó reducir los obstáculos para recibir servicios médicos de una porción vulnerable de Latinos en Sacramento y sus alrededores.

Algunos estudiantes estuvieron motivados por el movimiento Chicano de derechos, un esfuerzo social y político para mejorar la vida de los americanos mexicanos.

Los estudiantes se reunieron con el Departamento de Medicina Familiar y Comunitaria de UC Davis, otros estudiantes de UC Davis y miembros de la comunidad para crear una clínica de atención primaria con un nombre culturalmente relevante: Tepati viene de “Tepatli”, que quiere decir sanador en náhuatl, un lenguaje indígena hablado por los aztecas.

“Todos estaban muy entusiasmados con la creación de la clínica”, recordó Mark Diaz, un estudiante de UC Davis en el momento. Diaz y otros cofundadores realmente querían ofrecer atención médica a personas indocumentadas que no tenían cobertura de salud ni reunían los requisitos necesarios para recibir cobertura del gobierno.

“La Clínica Tepati respondió a esta necesidad”, agregó Díaz.

Desde entonces, la clínica no dejó de prosperar en sus dos objetivos principales: Proveer atención médica muy necesaria a pacientes sin acceso a servicios de salud y ofrecer una experiencia valiosa a estudiantes que querían ser médicos.

Si bien no todos los voluntaries eligen una carrera en medicina, aquellos que lo hacen están orgullosos de incluir su experiencia en Tepati en sus currículums, solicitudes de admisión en facultades de medicina y perfiles de LinkedIn.

“Una vez que los estudiantes se reciben de médicos, vuelven a Tepati y supervisan a otros estudiantes. Eso es lo que me pasó a mí,” dijo Diaz, que hizo capacitación en el programa de residencia de medicina de familia de UC Davis a principios de la década del 80 y trabaja ahora para el Sistema de Jubilación de Empleados Públicos de California.  

Dos voluntarias platican en la sala de recepción de Clínica Tepati
María Galarza-González, a la derecha, se despierta a las 5 a.m. los sábados para alistarse para su labor de voluntaria en la Clínica Tepati. "Para mí, es como que no tengo otra opción porque lo que hacemos por nuestros pacientes es hermoso, dijo.

Los estudiantes conectan con los pacientes

Cerca de 150 estudiantes trabajan como voluntarios en la Clínica Tepati cada año. La mayoría son estudiantes universitarios y algunos están en primero y segundo año de la facultad de medicina.

Los sábados, más de 40 voluntarios llenan las salas de examinación, los cubículos y la recepción de WellSpace Health, un centro de salud financiado por el gobierno federal, sin fines de lucro. WellSpace está cerrado los fines de semana y permite que Tepati use la clínica en 1820 J Street.

Los pasillos se llenan de estudiantes que se agrupan para ver a sus pacientes. Los grupos, encabezados por un estudiante profesional de salud, como un estudiante de medicina, incluyen un intérprete y alguien que toma notas. Cada grupo atiende a dos o tres pacientes en citas sin prisa hasta que alrededor de 25 pacientes han sido vistos.

Si bien los estudiantes profesionales de salud hacen de proveedores de atención primaria de facto, siempre hay médicos disponibles cerca cumpliendo el rol de preceptores para las consultas.

“A la mayoría del trabajo lo hacen los estudiantes. Yo sólo los guío y les doy dirección”, dijo Brenden Tu, preceptor y director médico de la clínica desde 2009.

Los estudiantes voluntarios representan una variedad de razas y etnicidades. Sin embargo, aquellos que son Latinos sienten un vínculo especial con los pacientes, que en su mayoría son inmigrantes latinos y hablan sólo español. Los estudiantes latinos generalmente se dan cuenta que sus pacientes comparten una experiencia de vida similar a la de sus padres.

“Yo veo más que simplemente pacientes”, dijo Alex Pulido. “Yo veo a mis padres, mis abuelos, míos tíos y mis tías en estos pacientes”. El vínculo, dijo, es una “motivación enorme” para ofrecer buena atención, especialmente cuando los pacientes sólo hablan español.

“Para mí estar aquí es una gran oportunidad”, agregó Pulido, que espera estudiar medicina en UC Davis o UCLA.

“Ver a los estudiantes ir a la facultad de medicina me da mucha satisfacción”, dijo Tu, un médico de familia que está en Tepati casi todos los sábados. “Yo veo a todos los estudiantes como mis hijos, sabes, entonces es como ver a mis hijos tener éxito”.

Maria Galarza-Gonzalez es estudiante especializada en psicología en UC Davis y no ha decidido si intentará entrar a la facultad de medicina. “La meta de mi carrera no es necesariamente ser médica, sino ayudar a servir a mi comunidad”, dijo.

Galarza-Gonzalez crecio en Waterford, un pueblo al este de Modesto donde hacen falta proveedores medicos.

Un estudiante de medicina en uniforme médico negro se apoya en una silla de exámenes médicos para chequear el latido de una mujer
El estudiante de medicina Frank Sierra dice que ser voluntario en la Clinica Tepati lo motiva a seguir estudiando medicina.

En los últimos tres años Galarza-Gonzalez ha estado en la clínica a las 7 de la mañana y no cambiaría eso por nada. “Para mí, es como que no tengo otra opción porque lo que hacemos por nuestros pacientes es hermoso”, dijo.

Frank Sierra, un estudiante en segundo año de medicina que lidera la mesa directiva de estudiantes de Tepati, dijo que trabajar como voluntario en la clínica ha tenido un efecto motivador en sus estudios.

“Cuando enfrentamos nuestros primeros dos años de trabajo didáctico y preclínico, las clínicas de estudiantes nos ayudan a encontrar la razón detrás de horas interminables estudiando con libros”, dijo. “A veces uno se puede olvidar por qué está estudiando si no tiene esa interacción con el paciente”.

La necesidad de atención médica no cesa

Mucho ha cambiado en el mundo político desde que la Clínica Tepati abrió, lo cual ha aumentado el número de personas elegibles para servicios de salud, incluyendo aquellos que son indocumentados.

Pero la expansión de elegibilidad de Medi-Cal no ha disminuido el número de pacientes que buscan atención médica gratuita en Tepati, que está financiada en menor parte por UC Davis y en gran parte a través de recaudación de fondos, donaciones y subsidios.

Líderes de la clínica señalan dos razones por las cuales la demanda sigue siendo grande.

En primer lugar, dicen, otras clínicas no ofrecen aquello por lo que Tepati es conocida: atención compasiva y culturalmente relevante donde los pacientes sienten que son escuchados.

Y en segundo lugar, aún si pacientes indocumentados y de bajos ingresos pueden inscribirse en Medi-Cal, no quieren experimentar la burocracia de navegar la versión estatal del seguro federal Medicaid. Puede llevar meses para ver a un proveedor de Medi-Cal, y las citas son siempre apresuradas. “En Clínica Tepati”, dice Sierra con orgullo, “pacientes pueden pasar una hora con su proveedor”.

En los últimos años la clínica ha respondido a las necesidades de los pacientes y expandido sus servicios más allá de atención primaria. Los pacientes pueden tener acceso a especialidades tales como podología, salud mental y dermatología.

Tepati y su clínica hermana de estudiantes en Knights Landing ahora ofrecen los exámenes físicos y evaluaciones psicológicas para solicitantes de asilo que no pueden afrontarlos en ningún otro lugar.

Responder a las necesidades de poblaciones vulnerables ha mantenido a Tepati relevante en los últimos 50 años.

“Hay otras clínicas que han adoptado el modelo de Tepati en otros estados”, dijo Mark Diaz, el médico de larga trayectoria que sigue siendo un mentor para los voluntarios. “Ha tenido un impacto grande — mucho más grande de lo que hubiéramos esperado como estudiantes en 1974 cuando la clínica empezó”.